
1º período: Etapa sensoriomotora (de 0 a 2 años) . Es una etapa, utilizan y perciben sus sentidos y capacidades motoras para conocer los objetos y el mundo. Durante esta etapa, los niños aprenden a manipular objetos, una vez que un objeto desaparece de la vista del niño o niña, no puede entender que todavía existe ese objeto (o persona).

2º período: Etapa preoperacional (de 2 a 7 años) Mantiene una postura egocéntrica, que le incapacita para adoptar el mismo punto de vista de los demás. Son capaces de utilizar el pensamiento simbólico, incluye la capacidad de hablar.
Los humanos utilizamos signos para conocer el mundo. Esta etapa está marcada por el egocentrismo. Factor importante en esta etapa es la Conservación.
El niño es capaz de pensar las cosas a través del establecimiento de clases y relaciones, y del uso de números, un papel importante es la imitación.

3º periodo: Etapa de las operaciones concretas (de 7 a 12 años). Puede aplicar la lógica, aplica principios, ya no conoce intuitivamente sino racionalmente. El niño hace uso de algunas comparaciones lógicas, no maneja todavía abstracciones.
Su pensamiento está anclado en la acción concreta que realiza. Disminución gradual del pensamiento egocéntrico y por la capacidad creciente de centrarse en más de un aspecto de un estímulo.
Empieza a entender el concepto de agrupar. Sólo pueden aplicar esta nueva comprensión a los objetos concretos (aquellos que han experimentado con sus sentidos)

4º periodo: etapa de las operaciones formales (de los 12 años en adelante). Hablamos del adolescente y del adulto, son capaces de acceder al pensamiento abstracto, desarrollan una mayor comprensión del mundo y de la idea de causa y efecto.
Esta etapa se caracteriza por la capacidad para formular hipótesis y ponerlas a prueba para encontrar la solución a un problema. Capacidad para razonar en contra de los hechos.